El aprendizaje sostenible es un nuevo enfoque que busca alinear una
forma de pensar sobre el aprendizaje con la acción dentro del aula para
generar un aprendizaje perdurable con la finalidad de garantizar el acceso a
educación bajo los principios de equidad, relevancia y sostenible.
La enseñanza responde a tres condiciones para el aprendizaje: Aprendizaje
para todos, enseñanza significativa, aprendizaje perdurable.
Durante un largo periodo, las personas con discapacidad eran segregadas
en grupos que buscaban integrarse desde la marginalidad. Esto generó una
concepción asistencialista y normalizante del abordaje de la
discapacidad, entendiendo que las personas con discapacidad eran sujetos que
requerían ayuda para suplir sus carencias y participar de la sociedad.
El enfoque del aprendizaje sostenible se concentra en las capacidades de
los estudiantes y de los profesores. Los términos discapacidad y dificultades
de aprendizaje permiten acceder a información relevante, para establecer los
tipos de apoyo necesarios que faciliten el acceso físico y/o curricular. La
enseñanza significativa se refiere a la práctica docente que permite
desarrollar las habilidades del siglo XXI. El papel del docente en el proceso
de aprendizaje de los estudiantes es de gran importancia, de éste depende que
los educandos adquieran y mantengan nuevos conocimientos con información
accesible para todos.
Para alcanzar el desarrollo integral de los estudiantes, el enfoque
del aprendizaje sostenible reconoce a cada uno de ellos en función de
sus capacidades en lugar de sus carencias o discapacidades con la
finalidad de eliminar las barreras que puedan presentarse en el proceso de aprendizaje.
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